No os voy a descubrir nada nuevo, nada no sepamos todos y es que la alimentación de un niño es el pilar fundamental para su crecimiento y desarrollo. Veréis en el caso de niños como Chloe esto se acentúa ya que tenemos que tener en cuenta factores como su escaso movimiento, lo que hace que la digestión sea mucho mas lenta y pesada y que la expulsión de gases sea complicada al igual que las “cacas”. Un niño de su edad anda, corre, salta, y esto hace que su transito intestinal sea mucho mas rápido y fácil. Los niños con parálisis cerebral, se mueven más bien poco o nada, el caso de Chloe es de lo que se mueven poco. Hay ratos que está sentada en una trona, otros ratos que la tenemos en un bipedestador específico para que esté en una posición erigida. Pero aunque la cambiemos de lugar o de posición, son pequeños movimientos. Por eso tenemos que cuidar mucho que su alimentación sea por una parte equilibrada, por otra rica en fibra y tampoco nos tenemos que olvidar de qué ingredientes provocan más gases que otros.
Por esto mismo nos hemos hecho íntimos amigos de la Thermomix, no os voy a hablar del robot en sí, solo os digo que por una parte no es para tanto, pero por otro lado es un invento maravilloso para hacer “potitos” entre otras cosas. Aunque también opino que en el mercado hay otros robots de cocina más baratos que hacen lo mismo.
En este caso me he puesto manos a la obra y he hecho compota de fruta variada. Nosotros lo usamos como meriendas y me han salido 7 botes de 200 ml, son muy sencillas de hacer.
Ingredientes:
- Ciruelas (hemos puesto bastantes)
- Plátanos
- Peras
- Manzanas
- Kiwis
- Sandía (sin pepitas)
No os pongo cantidades ya que esto depende de cada persona, y de lo que queráis. La Thermomix te va pesando los ingredientes conforme se van añadiendo, así es muy fácil calcular lo que te va a salir. Por ejemplo, si quieres hacer un botecito de unos 200 ml, tienes que echar fruta por un poco mas de 200 gramos. Siempre has de echar un poquito más ya que al calentar se evapora un poco de producto. Yo lo que hago es que el fin de semana preparo un montón y los congelo, así lo tengo preparado para toda la semana que me resulta muy cómodo.
Una vez que tenemos la fruta pelada, la cortamos en trozos grandes y la echamos dentro del vaso de la Thermomix, le colocamos la tapa, el cubilete parra que no salpique nada y seleccionamos en la pantalla 10 minutos, 100 ºC y velocidad 1. Aprovecha estos 10 minutos para recoger y limpiar los utensilios que hayas utilizado para el preparado de la fruta.
Transcurridos los 10 minutos solo queda triturar la compota. Seleccionamos 1 minuto a velocidad 10. Quedará triturado con una textura igual, o incluso me atrevo a decir que más fina, que la de los potitos que venden en el supermercado.
Con ayuda de una legua de gato vierte el contenido de la jarra en los diferentes botecitos que quieras almacenar, a mi me han salido un montón, estoy super contento. Ten mucho cuidado al verter la compota ya que está bastante caliente y la Thermomix, es muy chula y muy cara pero no le han hecho un pitorrito en el borde para facilitar el vertido de líquidos, lo que hace bastante complicado que no se derrame ninguna gota fuera de su lugar. Ahhh eso sí, te venden un accesorio adicional que sirve para esta función. Los ingenieros de la marca han pensado mucho en el negocio, poco en los usuarios.
Con esto hemos terminado, tenemos meriendas para toda la semana, eso sí deberás dejar enfriar y congelar los botes que no vayas a usar en las 24 horas próximas a su preparado. Hay quien piensa que al preparar fruta o zumo y dejarlo un tiempo antes de su consumo se le “van” las vitaminas, esto ha quedado demostrado que es un falso mito. Si es cierto que algo ocurre en la fruta, al igual que en otros ingredientes, con el paso de las horas. Por ejemplo una manzana o una pera, imagina lo siguiente: pela una manzana o una pera y la dejas en un plato durante unos minutos, no nos hace falta dejarla horas. Al cabo de unos 15 minutos podemos observar que su color se ha oscurecido debido a la oxidación. Es exactamente lo mismo que le ocurre a la fruta triturada o licuada. Se oxida, pero no pierde vitaminas. En el caso e congelara, ni siquiera se llega a oxidar, por lo que conserva totalmente sus propiedades, vitaminas y colores originales.
Es una forma muy natural, económica y sana de alimentar a nuestros hijos. Sé lo que estáis pensando, sí hago tanta cantidad le doy todas las tardes lo mismo para merendar y es un poco aburrido. Tenéis razón, yo también lo pienso, así que lo que hago es que preparo de varios tipos y los voy intercalando. Eso sí necesitas un congelador grande y unos post-it para marcar los botes y no confundirte, porque cuando tienes el congelador lleno de botes al final te pierdes.
A MERENDAR!!!!!